Mejora del rendimiento para deportistas profesionales y aficionados

Los beneficios para los atletas profesionales

Los deportistas de alto nivel tienen una percepción única de su cuerpo: pueden notar incluso las mejoras más pequeñas.

Es extremadamente gratificante trabajar con ellos, porque resultados que para otros podrían parecer ordinarios representan para ellos la sensación de haberse superado. Objetivos que antes parecían inalcanzables se superan con sorpresa y satisfacción.

El método elegido por los campeones

Hemos tratado a deportistas profesionales de todos los niveles, incluidos campeones mundiales en varias disciplinas, como futbolistas y boxeadores que confían en nuestra discreción. A estos niveles, el tratamiento suele realizarse sin el conocimiento de entrenadores, equipos médicos, fisioterapeutas y, sobre todo, managers para evitar malentendidos o dudas sobre las condiciones del atleta.

El origen de ese repentino aumento de rendimiento debe permanecer oculto. Además, el equipo médico podría no aprobar el tratamiento, mientras que el manager podría pensar que tiene un atleta menos en forma de lo que creía. A pesar de permanecer en las sombras, es una gran satisfacción ver a esos atletas triunfar sabiendo que hemos contribuido a su éxito.

Planificación del tratamiento de corrección del Atlas

Para los deportistas profesionales, el momento de la corrección es fundamental. Después del tratamiento, el cuerpo necesita un periodo de recuperación y adaptación para eliminar las compensaciones desarrolladas en respuesta a la desalineación. Por lo tanto, el momento ideal para someterse al tratamiento es durante la pausa estacional o las vacaciones, cuando el rendimiento no está bajo presión.

El tratamiento del Atlas representa un cambio significativo para el cuerpo del atleta y necesita ser metabolizado. Este aspecto es particularmente relevante para las disciplinas deportivas que requieren precisión y coordinación. Justo después de la primera sesión, el atleta puede experimentar una reducción temporal en la precisión y coordinación de los movimientos.

Los cambios posturales importantes inicialmente se perciben como "me siento torcido y descoordinado". Paradójicamente, aunque el atleta es consciente de estar más alineado, como lo demuestran las fotos posturales, en los primeros días posteriores a la corrección del Atlas podría prevalecer la percepción opuesta.

Se necesitan algunas semanas para que el cuerpo se adapte completamente a los nuevos ajustes y realice los necesarios ajustes. Durante esta fase pueden presentarse dolores y molestias transitorias, con reacciones de adaptación que pueden parecer inusuales. En la primera semana es común un aumento del cansancio y la necesidad de dormir. Superada esta fase, se puede observar una mejora progresiva y significativa en el rendimiento.

Contrariamente a lo que se podría pensar, los músculos cervicales de los deportistas, aunque generalmente más desarrollados que la media, tienden a estar menos tensos y son más fáciles de tratar que los músculos menos tónicos y cubiertos de tejido adiposo.

El banco de pruebas revela los beneficios de la corrección del Atlas